El papel de la podología en el cuidado
geriátrico

A medida que la población envejece, el cuidado de la salud en la tercera edad adquiere una relevancia creciente.

En este contexto, la podología emerge como una disciplina fundamental para el bienestar de las personas mayores.

Los pies son una parte esencial del cuerpo que, con frecuencia, no recibe la atención adecuada, y en el caso de los adultos mayores, su estado de salud tiene un impacto directo en la movilidad, la independencia y la calidad de vida.

En Vallpie, clínica especializada en podología, nos comprometemos a brindar un cuidado integral y profesional, entendiendo la importancia de la salud podológica en el envejecimiento activo y saludable.

Importancia de la podología en la geriatría

La estructura ósea, las articulaciones y la piel de los pies experimentan un desgaste natural con el tiempo, haciendo que las personas mayores sean más propensas a condiciones como callosidades, uñas encarnadas, juanetes, entre otras.

Estos problemas, aunque comunes, pueden derivar en complicaciones graves si no se tratan adecuadamente.

La podología geriátrica aborda estas condiciones con un enfoque preventivo y terapéutico, permitiendo que el paciente mantenga una movilidad óptima, evitando caídas y minimizando el dolor.

Problemas podológicos comunes en adultos mayores

Los adultos mayores presentan varias condiciones podológicas recurrentes, entre las que destacan:

→ Pie plano: Se refiere a una condición en la que el pie carece total o parcialmente de arco, lo que resulta en un mayor contacto de la planta del pie con el suelo.

→ Pie cavo: Es un tipo de pie que presenta un arco más elevado o pronunciado de lo habitual, lo que reduce su flexibilidad. Esto genera una distribución desigual del peso hacia la parte delantera del pie, causando dolor.

→ Pie valgo: Se caracteriza por una desviación del talón hacia el exterior y un descenso de la parte interna del pie, que parece tocar el suelo. Esta condición puede generar inestabilidad al caminar o correr, y en algunos casos, requiere tratamiento.

→ Pie varo: Es un pie cuya planta se orienta hacia adentro, apoyándose principalmente en el borde externo y en los últimos dedos (anular y meñique). Suele estar asociado a una alineación lateralizada de las piernas y rodillas.

→ Callos y durezas: Estos suelen aparecer por el uso de calzado inadecuado o por cambios en la marcha. Si no se tratan, pueden generar dolor y afectar la movilidad.

→ Grietas: Son lesiones cutáneas causadas por sequedad extrema, especialmente frecuentes en los talones. Además de ser muy dolorosas, pueden convertirse en un foco de infección.

→ Uñas engrosadas y encarnadas: Con el envejecimiento, las uñas pueden volverse más gruesas y difíciles de cortar. Además, problemas de circulación o infecciones pueden llevar a que las uñas se encarnen.

→ Juanetes: La deformación del dedo gordo del pie es común en personas mayores y, sin el tratamiento adecuado, puede limitar el uso de calzado y causar dolor crónico.

→ Infecciones fúngicas: Las infecciones por hongos en las uñas o en la piel son comunes y, en personas mayores, pueden ser más difíciles de erradicar y más propensas a propagarse.

→ Problemas circulatorios: La circulación deficiente, muy común en la tercera edad, afecta la salud de los pies y puede derivar en úlceras y problemas que requieren intervención inmediata.

→ Espolones: Son acumulaciones de calcio en los huesos de los pies que pueden ser muy dolorosas e incómodas. Entre ellos, el espolón calcáneo es uno de los más comunes.

→ Ojo de gallo: También conocido como heloma interdigital, es una lesión que se desarrolla entre los dedos del pie.

Onicodistrofia: Alteración en la forma y/o color de las uñas, provocada por factores congénitos, enfermedades de la piel como la psoriasis, enfermedades sistémicas como el lupus eritematoso, o por traumatismos, problemas estructurales o infecciones.

Problemas Podológicos Asociados al Sobrepeso

Beneficios de la atención podológica para personas mayores.

La atención podológica especializada proporciona numerosos beneficios para los adultos mayores, entre los que destacan:

  • Mejora de la movilidad: Unos pies saludables permiten a los pacientes moverse con mayor comodidad y seguridad, lo que contribuye a una vida más activa e independiente.
  • Prevención de caídas: Los problemas en los pies pueden afectar el equilibrio, y la falta de estabilidad es una de las causas principales de caídas en personas mayores. El cuidado podológico adecuado ayuda a minimizar este riesgo.
  • Reducción del dolor: Muchas afecciones podológicas pueden causar dolor que interfiere con las actividades diarias. Los tratamientos profesionales, como los que ofrecemos en Vallpie, alivian estos síntomas y mejoran el bienestar general del paciente.
  • Detección temprana de problemas: Los podólogos están capacitados para identificar signos de problemas circulatorios, diabetes y otras condiciones que pueden reflejarse en los pies, permitiendo una intervención temprana.

Tratamientos podológicos en el cuidado geriátrico.

En Vallpie, nos especializamos en brindar tratamientos podológicos adaptados a las necesidades específicas de cada paciente mayor. Estos tratamientos incluyen:

Corte y cuidado de uñas: Realizado de manera profesional para evitar problemas como uñas encarnadas o lesiones en pacientes con piel frágil.
Limpieza y eliminación de durezas: Para aliviar la presión y el dolor, mejorando la comodidad al caminar.
Plantillas ortopédicas: Personalizadas para corregir problemas de marcha y brindar soporte adecuado.
Tratamientos para el pie diabético: La diabetes afecta la salud de los pies, y en Vallpie ofrecemos un enfoque integral para prevenir complicaciones graves como las úlceras.

Ver: Pie geriátrico

Ver: Pie diabético

Ver: Pie Charcot

Tratamientos podológicos en el cuidado geriátrico

Educación y prevención: Un valor añadido.

Además de los tratamientos, en Vallpie valoramos la educación como una herramienta fundamental en la prevención. Enseñamos a los pacientes y sus cuidadores a realizar cuidados básicos en casa, a elegir el calzado adecuado y a estar atentos a cualquier cambio en sus pies que pueda requerir una consulta.

Ver: Espolón calcáneo

Ver: Dolor de talón

Ver: Pie plano

Ver: Juanetes